domingo, 15 de marzo de 2009

Dame tu mano


Formo parte de un club de senderismo.

Lo mismo realizamos rutas familiares que participamos en Travesías de resistencia, generalmente por Andalucía.

Con el paso del tiempo te das cuenta que el sufrimiento une y que el mayor premio es el abrazo final con los compañeros y compañeras que participan en tales eventos, sea cual sea el resultado.

Estas décimas va por ellos y ellas.

Dame tu mano

Y no es ser el primero,
ni el deseo de ganar
lo que me anima a llegar.
Este es el premio que quiero:
llegar juntos, compañero.

Camino, ahora, sin prisa,
presto a dar esa sonrisa
que un día fue para mí
bálsamo que recibí
cuando la fatiga avisa.

El esfuerzo no es en vano.
Un apoyo buscarás,
entonces comprobarás
que siempre, tarde o temprano,
alguien te dará la mano.

Cuando me encuentro cansado
una voz corre a mi lado
con un “ya estamos ahí”.
Y me olvido que sufrí
si juntos hemos llegado.

4 comentarios:

Manuel García dijo...

No sabía nada de esta pasión tuya. La verdad es que el campo te atrae. Gran parte de las historias que escribo se forjan en el campo. Cuando voy a correr (ultimamente no mucho) o cuando voy a coger algo.
Muy buena entrada primo. Sigue, seguid disfrutando.

mi primo y yo dijo...

Querido primo Manué.

Ahí estamos.

Es una experiencia que no debemos perdernos. Andar por la sierra te da otra visión de la vida, medimos de forma diferente los tiempos y vivimos atentos cada momento.

Suerte que tengo de vivir cerca del mar y no muy lejos de la sierra.

Un abrazo

alexa;) dijo...

Hay tanto en tu poema..
no diré todo, sólamente la parte en la que se percibe un modo de defender la amistad y el temple por lograr una meta..
sigue escribiendo.. sigue escalando..

siempre habrá una mano..

besos
alexa;)

mi primo y yo dijo...

Hola Alexa.

Siempre hay una mano, incluso en los momentos en que creemos no necesitarla hay una cerca.

Gracias por tus palabras.

Besos